viernes, 25 de junio de 2010

Del espacio cerrado al espacio abierto: Colegio Shama


Les comparto estas fotos de una actuación en el Colegio Shama de San Juan de Lurigancho. Una sensación personal es el tanto y tanto cariño con que los niños y maestros preparon esa tarde tan especial, llena de amor para el planeta: compromisos de ser mejor, desfile escolar, atención absoluta a nuestra obra "El día que el planeta volvió a sonreir" y mucha participación de todos.
Es cierto que hay escenarios más cómodos, pero pocos tan acogedores como este, en las arenas de San Juan.

jueves, 24 de junio de 2010

Una experiencia en las alturas de Chavín

Descubriendo la TIERRA DE LOS NIÑOS

Hace poco menos de una semana, un grupo de personas de dentro y fuera del país atraídas por las causas ambientales, nos sumamos al curso de "Metodología de Tierra de Niños, que promueve la Asociación por la Niñez y su Ambiente, ANIA.

Su director Joaquín Leguía y sus promotoras en Chavín; Brenda y Miluska nos dieron un interesante alcance sobre el papel que pueden desarrollar los niños en la mejora de su ambiente y en el deber que nosotros, como adultos, estamos llamados a obedecer, orientando y motivando a los pequeños a conservar la naturaleza, utilizando para ello una gran reserva de arte, creatividad, energía y compromiso.

En su Tierra de Niños, los niños son los protagonistas absolutos, líderes del gran cambio. Ellos se entusiaman, ríen, juegan y se divierten a traves de una acción que se traduce en un hermoso hecho de amor; sea el espacio que sea, los chicos convieten espacios áridos y tristes, en lugares mágicos... de pronto, un balde abandonado, una botella de plástico vacía, una llanta o hasta una mochila vieja se convierten en lugares perfectos para que la vida se abra paso, y así, plantas y flores asoman felices, al igual que abejas, mariposas y pájaros. Es bello ver como el color y la fiesta reviven cualquier espacio, más allá de cualquier condición social. Con Tierra de Niños, son los niños que se vuelven responsables de su tierra, con la visión de cultivar para ellos, para su familia y para su comunidad, así se trate de tres pequeñas macetas o una parcela que sus padres o maestros donen con amor, el aprendizaje es uno: "estoy haciendo algo por mi planeta".

Para todos los que compartimos este curso, ha sido una experiencia realmente maravillosa y que nos deja muchos retos. Chavín es un ejemplo de casos felices donde los niños han desarrollado esta actividad que debería replicarse en todas las provincias. Tierra de Niños es una apuesta de paz, muy necesaria para pintar de belleza las áreas secas de nuestra casa, y de nuestro corazón.

Izq. Vista de un colegio de Huari. La vida asoma en la tierra y en los baldes... todo sirve.









Una foto con el director de ANIA, Joaquín Leguía, y Jessica, compañera de curso y promotora de Tierra de Niños.


En la Tierra de Niños, son los niños quienes deciden los cultivos y quienes se hacen cargo de su cuidado.



GRACIAS!!!

A mis amigos de Chavín, a todos los profesores maravillosos que enseñan en las alturas de nuestro mágico Ancash; Juan, César, Magda y María, a la pequeña Pamela porque su sonrisa nos alegró de una manera muy especial. A mis compañeros que vinieron desde tan lejos; Bolivia, Brasil , Nicaragua, El Salvador; Ana María, Hebert, Bea, Javier. Al profe Jorge de Cajamarca, Anelí de Cusco, a la energía de Rubí de Arequipa, y a Mónica y Jessica de Lima... ¡Muchas Gracias por haber hecho esta experiencia tan enriquecedora!, y unas gracias especiales a los niños y niñas de Huari, y a ¡JOAQUÍN! por su enseñanza y su perseverancia en ese sueño que ahora todos compartimos.

(Info sobre ANIA: http://www.mundodeania.org/)